Hace un tiempo, viajando en ómnibus con destino al lugar donde doy clases, me encontré con un personaje interesante. El viaje dura apenas una media hora, ya que el centro al que acudo es a unos pocos quilómetros de la ciudad. Siempre un transporte colectivo es motivo de encuentro con diversos tipos de personas, con situaciones de todo color, conversaciones que uno escucha sin quererlo y quedan flotando por ahí. En fin, de vez en cuando está bueno alejarse del ensimismamiento, salir de la mente o quitarse los auriculares, para contemplar el entorno y sus detalles. Photo by Ant Rozetsky on Unsplash Yo sentado en el fondo del vehículo, veo subir a un señor de unos setenta años, quizás más. Lentamente maniobrando el peso de sus bolsos como podía a medida que avanzaba en el pasillo, dejando atrás los asientos ocupados, hasta llegar y sentarse en el asiento contiguo al mío. Desde un primer momento la presencia de la guitarra descansando junto a mí en el asiento le llamó la atenció
...and following our will and wind we may just go where no one's been...